Nueva Zelanda es un país que se siente como un mundo en sí mismo. Con majestuosos fiordos, ondulantes colinas verdes, ciudades vibrantes y una cultura profundamente arraigada en las tradiciones maoríes, Nueva Zelanda ofrece toda una vida de exploración en un paquete compacto. Sumérjase en lo mejor que este impresionante destino tiene para ofrecer, desde maravillas naturales hasta lugares emblemáticos.
Parque Nacional de Fiordland: majestuosos fiordos
Comience su viaje en el Parque Nacional de Fiordland, hogar del legendario Milford Sound. Rodeado de imponentes acantilados, cascadas y exuberantes selvas tropicales, Milford Sound es una obra maestra natural. Realice un crucero en barco para apreciar plenamente la grandeza del fiordo, o camine por el mundialmente famoso Milford Track para disfrutar de una experiencia de cerca. Dato curioso: Rudyard Kipling una vez llamó a Milford Sound la “octava maravilla del mundo.”
Rotorua: país de las maravillas geotérmicas
Rotorua, ubicada en la Isla Norte, es famosa por sus burbujeantes piscinas de barro, sus géiseres humeantes y su vibrante cultura maorí. Visite el pueblo de Whakarewarewa para disfrutar de representaciones y cocina tradicionales maoríes. No se pierda la surrealista Champagne Pool en Wai-O-Tapu, donde los colores vivos bailan en la superficie del agua. Consejo profesional: ¡Prepárese para el olor sulfúrico, es parte del encanto geotérmico de Rotorua!
Bahía de las Islas: paraíso costero
Un paraíso para los amantes del agua, la Bahía de las Islas cuenta con más de 140 islas dispersas por aguas turquesas. Este paraíso costero es perfecto para navegar, bucear y observar delfines. Los amantes de la historia pueden visitar Waitangi, donde se firmó el Tratado de Waitangi, que marcó la fundación de la Nueva Zelanda moderna. Consejo profesional: súbase a un recorrido en barco para descubrir calas escondidas y playas apartadas.
Auckland: ciudad de las velas
Como la ciudad más grande de Nueva Zelanda, Auckland es una vibrante mezcla de sofisticación urbana y belleza natural. Conocida como la “Ciudad de las Velas,” ofrece impresionantes puertos, restaurantes de talla mundial y fácil acceso a islas cercanas como Waiheke, famosa por sus bodegas. Suba al monte Eden para disfrutar de vistas panorámicas de la ciudad, o visite el Museo de la Guerra de Auckland para aprender sobre la historia de la región.
Wellington: cultura capital
Wellington, la capital de Nueva Zelanda, está repleta de creatividad y encanto. Enclavada entre colinas y un pintoresco puerto, alberga una próspera escena artística, fantásticos cafés y el emblemático Museo Te Papa. Los entusiastas del cine pueden explorar Weta Workshop, la fuerza creativa detrás de las películas de El Señor de los Anillos. Consejo profesional: no se vaya sin probar el café de talla mundial de Wellington.
Monte Cook: esplendor alpino
El monte Cook, o Aoraki, es la montaña más alta de Nueva Zelanda y un destino de ensueño para excursionistas y fotógrafos por igual. Rodeado de lagos glaciares y picos escarpados, forma parte de un impresionante paisaje alpino. El Hooker Valley Track es una caminata obligada, que ofrece vistas espectaculares de la montaña y sus glaciares circundantes.
Parque Nacional Abel Tasman: tesoros costeros
Esta joya de la Isla Sur es conocida por sus playas doradas, aguas cristalinas y exuberantes bosques. Explore el Abel Tasman Coast Track, una caminata de varios días que lo lleva a través de calas apartadas e impresionantes vistas. Para una perspectiva diferente, alquile un kayak y reme a través de las aguas turquesas del parque.
Península de Coromandel: gemas ocultas
La península de Coromandel es un tesoro de belleza natural, con sus playas vírgenes, densos bosques y atracciones únicas como Hot Water Beach. Aquí, puede cavar su propia piscina de aguas termales en la arena durante la marea baja. No se pierda Cathedral Cove, un impresionante arco de roca que se ha convertido en uno de los lugares más fotografiados de Nueva Zelanda.
Hobbiton: Delicia de la Tierra Media

Adéntrese en el mundo mágico de la Tierra Media en Hobbiton, el icónico escenario de las películas de las trilogías de El Señor de los Anillos y El Hobbit. Pasee por la Comarca, visite la casa hobbit de Bilbo Bolsón y disfrute de una bebida en la posada Green Dragon. Dato curioso: Hobbiton fue reconstruido permanentemente después de las películas y ahora es una de las atracciones más populares de Nueva Zelanda.
Queenstown: capital de la aventura
Conocida como la “Capital Mundial de la Aventura,” Queenstown es un patio de recreo para los amantes de la emoción. Pruebe el puenting, el paracaidismo o las lanchas a reacción, o tome un paseo en góndola hasta Bob’s Peak para disfrutar de impresionantes vistas del lago Wakatipu. Para una experiencia más relajada, explore las renombradas bodegas de la región.
Glaciar Franz Josef: maravilla glacial
El glaciar Franz Josef es una joya rara, donde puede caminar a través de antiguas formaciones de hielo en un entorno de selva tropical templada. Las visitas guiadas y las caminatas en helicóptero ofrecen experiencias inolvidables, que le permiten maravillarse con el enorme tamaño y la belleza del glaciar.

Parque Nacional Tongariro: belleza volcánica
El parque nacional más antiguo de Nueva Zelanda alberga el Tongariro Alpine Crossing, a menudo aclamado como una de las mejores caminatas de un día del mundo. Pase por cráteres volcánicos, lagos esmeralda y respiraderos humeantes mientras atraviesa este paisaje de otro mundo. Consejo profesional: comience temprano para evitar las multitudes y captar la luz de la mañana en los picos.
Lago Tekapo: gema turquesa
Las brillantes aguas turquesas y los cielos estrellados del lago Tekapo lo convierten en un destino de ensueño. Visite la Iglesia del Buen Pastor para disfrutar de una vista perfecta y no se pierda la observación de estrellas en la Reserva Internacional de Cielo Oscuro Aoraki Mackenzie.
Dunedin: herencia escocesa

Conocida como la “Edimburgo del Sur,” Dunedin es rica en herencia escocesa y encanto arquitectónico. Explore el castillo de Larnach, el único castillo de Nueva Zelanda, o pasee por los espectaculares acantilados de la península de Otago, hogar de colonias de albatros y leones marinos.
Kaikoura: maravilla marina
Kaikoura es un paraíso para los entusiastas de la vida marina. Vaya a observar ballenas, nade con delfines o observe lobos marinos tomando el sol en la costa rocosa. Consejo profesional: el marisco aquí es excepcional, no se pierda el cangrejo de río, una especialidad local.
Parque Nacional Westland Tai Poutini: país de las maravillas glaciar
Este parque alberga los glaciares Franz Josef y Fox, así como exuberantes selvas tropicales y costas escarpadas. Tome un vuelo panorámico para apreciar plenamente la grandeza de este paisaje tallado por glaciares.
Napier: paraíso Art Deco
Napier es una ciudad costera famosa por su arquitectura Art Deco bien conservada, un legado de su reconstrucción en la década de 1930 después de un devastador terremoto. Pasee por sus vibrantes calles, visite las bodegas locales o asista al festival anual Art Deco para retroceder en el tiempo.
Parque Te Whaipounamu Fjord: fiordos encantadores
Este sitio declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO abarca los fiordos más espectaculares de Nueva Zelanda, incluidos Milford Sound y Doubtful Sound. Estos paisajes prístinos se exploran mejor en barco, ofreciendo un asiento de primera fila a las cascadas y los escarpados acantilados.
Isla Stewart: naturaleza salvaje
Para una verdadera escapada a la naturaleza, la isla Stewart ofrece bosques vírgenes, playas apartadas e increíble observación de aves. Esté atento a los kiwis, que a menudo se ven en la naturaleza aquí.
¿Le gustaría añadir Nueva Zelanda a su lista de deseos?
Desde sus majestuosos fiordos y vibrantes ciudades hasta sus maravillas geotérmicas y paisajes cinematográficos, Nueva Zelanda es un país que captura el corazón y la imaginación. Ya sea que busque aventura, tranquilidad o inmersión cultural, esta tierra de belleza natural tiene algo para todos.